Recientemente, el Tribunal Económico-Administrativo Regional (TEAR) de la Comunidad Valenciana ha emitido una resolución significativa para los contribuyentes, que podría ser de especial interés para quienes, tras haber sufrido perjuicios derivados de situaciones extremas, como podrían ser las inundaciones provocadas por la DANA, arriendan viviendas. En concreto, el fallo aborda la aplicación de deducciones fiscales por arrendamiento de vivienda en un supuesto de poseer una vivienda cercana pero inhabitable, sentando un importante precedente.
El caso: deducción por arrendamiento de vivienda habitual
La reclamante interpuso un recurso contra la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT), que había eliminado la deducción autonómica por arrendamiento de vivienda habitual correspondiente al IRPF del ejercicio 2020 porque poseía un inmueble cercano . El argumento principal del recurso fue que, durante ese ejercicio fiscal, este inmueble no era habitable debido a su estado ruinoso, careciendo de cédula de habitabilidad y licencia de ocupación, que no se obtuvieron hasta el año 2022.
Esta situación refleja un problema que podría afectar a cualquier contribuyente con su vivienda inhabitable debido a daños causados por desastres naturales, como la DANA, que tiene la necesidad de alquilar otra para poder residir, en el supuesto que las autoridades fiscales exigieran el cumplimiento de requisitos que pueden estar fuera del control del propietario.
La decisión del TEAR: un enfoque basado en la realidad
El TEAR analiza el caso y tras evaluar la documentación presentada, que incluye pruebas del estado ruinoso del inmueble y la posterior obtención de la cédula de habitabilidad en 2022, concluye que:
- El inmueble no era habitable en 2020: Al carecer de los requisitos legales de habitabilidad, el inmueble no cumplía con la definición de “vivienda” según la Ley 8/2004, de 20 de octubre, de la Vivienda de la Comunidad Valenciana.
- Imposibilidad ajena a la voluntad de la contribuyente: Se considera que la inhabitabilidad del inmueble es una causa justificada y ajena a la voluntad de la reclamante, lo que impedía su uso como vivienda.
- Finalidad de la norma: Citando de forma expresa su preámbulo el TEAR afirma que, la Ley 13/1997, intenta paliar los problemas que se suscitan en el ámbito de la vivienda, apoyando a un colectivo de personas especialmente sensibles, por lo que la deducción autonómica busca beneficiar a quienes realmente necesitan alquilar una vivienda como residencia habitual. Penalizar a la reclamante por un inmueble inhabitable iría en contra del espíritu de la ley.
Con base en estos argumentos, el TEAR decide estimar las alegaciones de la reclamante y anula la liquidación provisional de la AEAT.
Implicaciones para los contribuyentes
Esta resolución subraya la importancia de una interpretación teleológica y contextual de las normas fiscales. En lugar de aplicar estrictamente las normas sin considerar circunstancias extraordinarias, es esencial buscar una solución justa que respalde a los ciudadanos perjudicados. Algunos puntos clave que destacan de este caso son:
- Carga de la prueba: Aunque recae en el contribuyente demostrar las circunstancias que le favorecen, este caso evidencia que una documentación adecuada puede ser determinante.
- Flexibilidad en la aplicación de requisitos: El TEAR acepta que circunstancias excepcionales, como la inhabitabilidad de un inmueble, pueden justificar el incumplimiento de ciertos requisitos formales.
- Protección de derechos: La decisión protege los derechos de los contribuyentes frente a interpretaciones administrativas que pueden resultar lesivas.
Conclusión: un precedente relevante
El fallo del TEAR no sólo resuelve favorablemente el caso, sino que también sienta un precedente para otros contribuyentes en situaciones similares, como aquellos afectados por desastres naturales que dejan sus propiedades inhabitables. La resolución refuerza la necesidad de aplicar las normativas fiscales con sensibilidad hacia las realidades excepcionales, asegurando que se respete el principio de justicia tributaria.
Para quienes se enfrentan a disputas fiscales, este caso también destaca la importancia de presentar pruebas sólidas y argumentaciones bien fundamentadas. Por ejemplo, en este caso, la contribuyente aportó la cédula de habitabilidad y fotografías que evidenciaban el estado ruinoso del inmueble, lo que fue crucial para demostrar su inhabitabilidad. Asimismo, subraya la necesidad de recurrir a las instancias administrativas y judiciales cuando sea necesario para defender sus derechos.
Autora del Post: CRISTINA M. NAVARRO ESTEVE
(Tesorera APAFCV)